30 de octubre de 2010

Trípode Giottos



En todo equipo fotográfico no puede faltar un buen trípode. Como cualquier aficionado, empecé con un trípode de 29,95 euros de Fotoprix de aluminio y plástico, de esos que tiemblan cada vez que estornudas o se apoya una mosca en el parasol del objetivo. Llega un momento que te das cuenta de que es absurdo apoyar un equipo de varios miles de euros en un trípode "de oferta" y decides invertir en una de las piezas importantes - más de lo que parece - del equipo de todo fotógrafo serio. Después de buscar y rebuscar entre las marcas más comunes como la popularísima Manfrotto encontré en JordiBas, una tienda de la calle Pelayo de Barcelona, una oferta interesante de una marca desconocida para mí. Se trataba del trípode Giotto's MT9260. Su estructura, robustez y estabilidad me sedujo desde el primer instante y tras lanzarme a por él, elegí como rótula a la MH5001 de la misma marca. En la actualidad fabrican modelos de aluminio, fibra de carbono y aleaciones ligeras. El que me compré yo es de metal y aluminio. Ligero, pero no deja de ser metal y cargar con él todo el día puede ser un engorro; especialmente si eres de los que te da pereza meterlo y sacarlo de su cómoda bolsa de transporte cada dos por tres. Hay otro modelo muy similar de fibra de carbono (MT8261):




El MT9260 pertenece a la serie profesional clásica (no es de los de 3 direcciones de giro de última generación) de Giotto's y concretamente a la categoría de trípodes con sistema de cierre por rosca conocido como SDL o Speedy Dust-Proof Locking, resistente al polvo y la arena y además absorbe las vibraciones. Este tipo de cierre tiene muchos detractores pero debo decir que a mi, personalmente, me parece genial y me va muy bien. Las secciones del trípode están unidas por unas roscas de caucho o goma altamente resistente al desgaste, que con 1/8 de vuelta se afloja y permite el desplazamiento de las secciones. Se puede operar perfectamente con una mano. El movimiento de las piezas es suave y confortable.



Este sistema de rosca tiene como todo, sus cosas buenas y malas. He podido comprobar que en ocasiones, la rosca se encalla y tienes que hacer un poco de fuerza para que ceda. También tienes que tener cuidado con no pasarte de rosca y es recomendable que después de su uso lo limpies a conciencia ya que siempre, quieras o no, se mete polvo o arena en las juntas y se mezcla con la grasa de silicona que lubrica las juntas. Dicho de otro modo, es un sistema cómodo y fácil de usar pero que conviene manejarlo con cuidado y limpiarlo periódicamente.

Este trípode está pensado para fotografía macro. Le puedes reemplazar la barra central por una de menor longitud (debes comprarla por separado) y con las herramientas que incluye de serie, que vienen en una práctica funda de tejido resistente, se desmonta rápida y fácilmente.






A continuación se puede ver cómo se realiza la manibra de extracción de la columna central del trípode para sustituirla por la MTC corta o bién, invertir la posición de la columna para colgar la cámara boca abajo y poder realizar fotografía prácticamente arrán de suelo y obtener macros o tomas con puntos de vista espectaculares:




Las patas del trípode y el conjunto son de muy buen material, que transmite solidez y estabilidad. Otro aspecto interesante es que las patas se pueden abrir más de lo habitual si retiras el limitador. Esto es una pieza presente en cada una de las patas que bloquea su movimiento a partir de cierto ángulo y se manipula estirando para liberar el bloqueo o apretando para activarlo:






Extendido al máximo el trípode adopta el siguiente aspecto. Conviene recordar que esto sólo es viable si tienes una columna central corta MTC ya que de lo contrario, deberías aflojar la palomilla centrar para que se desplace la columna hacia arriba y evitar que choque con el suelo y moleste y esto, no tendría sentido ya que recuperarías altura:





Por otra parte, el trípode incluye un práctico nivel de burbuja que te ayudará a encontrar la horizontalidad en tus tomas paisajísticas y panorámicas:




A parte de la funda con las herramientas necesarias para el mantenimiento del trípode, te incluyen una práctica bolsa de transporte de bastante buena calidad, muy resistente y también una práctica correa de transporte con un gancho en un extremo para asegurarla al trípode. El otro extremo se hace un nudo corredero que se cierra fácilmente estirando de la correa.






El trípode es sólido, robusto y muy estable. También es pesado Si estás pensando en instalar un buen objetivo encima de peso considerable puedes hacerlo sin preocupaciones y con confianza. Los especificaciones técnicas del trípode serían:
  • Fabricado en aluminio
  • 28 mm de diámetro de las patas (sección más gruesa)
  • 4 secciones en cada pata
  • Plegado hace 55 cm de longitud
  • La altura mínima del suelo extendido al máximo son 23 cm
  • La altura máxima sin extender la columna central es de 141 cm
  • La altura máxima extendiendo la columna central al máximo es de 164 cm
  • 2.04 kg de peso sin carga (sin cabezal ni equipo fotográfico encima)
  • Soporta hasta 8 kg de carga

El cabezal que adquirí para este trípode fue el MH 5001, también de Giottos. Es tipo 3D y bastante cómodo. Pesa entorno a los 800 gr.





Los mangos del cabezal se puedes desmontar en cualquier momento y enroscarlo uno dentro del otro, con la finalidad de poder plegar al máximo el trípode e introducirlo con facilidad en su bolsa de transporte:





En conclusión, se trata de un excelente trípode, robusto, polivalente pero que a pesar de ser de aluminio, esos 2.04 quilitos se acaban notando a lo largo del día. En la actualidad recomendaría el equivalete de fibra de carbono que pesa 1.53 kg con un cabezal ligero y simple como los de bola. A pesar de ello, es un trípode que me ha dejado hasta la fecha completamente satisfecho en cuanto a resultados fotográficos y además, tiene una excelente relación calidad-precio.

18 de octubre de 2010

Zuiko 35-100 2.0

El Zuiko 35-100 ED 2.0 para formato 4/3 no es un objetivo cualquiera. Se trata de una verdadera joya de la óptica. Fabricado por Olympus, pertenece a la categoría Top Pro de objetivos ultraprofesionales de la casa. Se trata de un teleobjetivo de construcción semi-telecéntrica con sistema de zoom interno con mecanismo de flote, de construcción robusta, impermeabilizado, con un rango focal de 35 a 100 mm (70-200 en equivalente a película de 35 mm) y con un diafragma de 2.0 a 22, pudiendo mantener la abertura a 2.0 en todo el rango focal. Un auténtico caramelo.





El diafragma está formado por 9 palas. El cuerpo está fabricado íntegramente en metal negro mate con un acabado impecable y sellado con juntas tóricas para protegerlo del agua y el polvo. Los aros de enfique manual y zoom están cubiertos de goma agradable al tacto y son suaves al giro, especialmente el de enfoque. Este último gira 460º en sentido contrahorario mientras que el de zoom lo hace 60º en el sentido horario. El cuerpo del objetivo está marcado con las distancias focales 35, 50, 75 y 100 y la ventanilla de foco marca desde 1.4 metros al infinito.

Está constituido por 21 cristales agrupados en 18 grupos de elementos, uno de los cuales es una lente Super ED y cuatro ED de baja dispersión para corregir aberraciones cromáticas y otros problemas ópticos. Es un objetivo de una calidad extrema y nitidez soberbia, a cualquier distancia focal y cualquier abertura de diafragma. El precio es, por lo tanto, consecuente con la calidad obtenida, los resultados y la satisfacción que produce su uso. Según varios ensayos realizados por diversos laboratorios de pruebas como PopPhoto.com (16 de Diciembre de 2008) la nitidez y contraste de este objetivo el rendimiento óptico es asombroso, excelente a 35 y 100 mm y "doble excelente" (sic) a 75 mm. La distorsión analizada con DxO Analizer 2.0 demuestra que hay una distorsión ligera e imperceptible ("pincushion distortion") a 35, 75 y 10 mm del 0.04%, 0.06% y 0.08% repectivamente. También hay evidencias marginales de pérdida de luminosidad a 35 y 100 mm, pero ninguna a 75 mm. En el siguiente diagrama óptico se aprecia de color azul la lente Super ED y en verde las lentes ED:




El ángulo de visión varía con la distancia focal de 34º a 12º, para 35 mm y 100 mm respectívamente. Ahora mismo es mi objetivo favorito para uso polivalente ya que esta distancia focal me permite realizar tomas tan distintas como paisajes, retratos o fotografía urbana, con la tranquilidad que proporciona todo objetivo profesional resistente al agua y al polvo. El zoom es suave y el motor de enfoque, sin ser de última generación, es silencioso y rápido aunque sensiblemente más ruidoso que los SWD. El factor de ampliación es de 0.09x (0.18x en 35 mm), poco interesante para macro. Esto significa que a la focal de 35 mm el relación de ampliación o factor macro es de 1:22.8 y a 100 mm es 1:8.77 por lo que no se podría considerar un objetivo adecuado para esta finalidad.




Pesa 1.800 kg con el anillo del trípode, que son 150 g del peso total. El anillo se puede extraer aflojando la palomilla de sujeción. Pese a esto, es relativamente ligero y cómodo de llevar. Haciendo un poco de fuerza :-) se puede tirar perfectamente a pulso, además, con un cuerpo estabilizado como el de la E-3 en modo IS1 no hay trepidación alguna, entendiendo que se está disparando dentro del límite de nitidez para la focal utilizada y con los ajustes de exposición y sensibilidad adecuados:


Olympiaco cazado por PapaToni en el barrio Gótico de Barcelona (16/10/10)
Imagen tomada con un Zuiko 12-60 y una E-30. (12 mm 1/60 f:2.8 iso 400)



Hay que tener en cuenta, que el conjunto del objetivo y el cuerpo de la E-3 con grip HLD-4 gana un peso considerable, casi 3 kg. El uso de un monopié puede resultar una buena opción si bien, quiero insistir en que es perfectamente factible "cargar con el trasto" y tirar a pulso una jornada entera.


Por las calles de Barcelona frente al MACBA (16/10/10).
Original tomada por el amigo Victor con un fantástico Leica 50mm 1.4 para Olympus.


He mencionado antes el rango de diafragma de esta maravilla óptica. La extrema luminosidad de este objetivo hace que tenga un "bokeh" sublime, ideal para obtener un buen desenfoque del fondo en retratos y es excelente para fotografía nocturna. Tiene un foco super-selectivo, lo que nos permite jugar a nuestro antojo desenfocando el fondo o el primer plano u otro según nos convenga. Es un objetivo para divertirse con él. En le límite exterior del barril hay un anillo con cuatro botones para bloquear el autofoco distribuidos ergonómicamente para que sean accesibles desde cualquier posición, ya sea disparando en vertical u horizontal. También dispone de un dial selector que permite delimitar la distancia de enfoque del autofoco en tres posiciones, para enfoque cercano entre 1.4 y 3 metros, para enfoque lejano a partir de 3 metros y hasta el infinito y sin limitación. A fecha de Diciembre del 2008 estaba considerado el objetivo de su clase, en términos de rango focal y abertura, con el enfoque más rápido del momento y a día de hoy sigue siendo imbatible.


Comparativa de tamaño entre Zuiko 35-100 2.0 y el 50-200 2.8
(c) BrandonEu Photography

Zuiko 35-100 2.0 en el extremo izquierdo, 50 mm macro en el derecho.
(c) BrandonEu Photography


En la actualidad, este objetivo se puede encontrar de ocasión o segunda mano a precios que oscilan entorno a los 1.250€ y 1.600€ en el mercado nacional. Es un precio que resultará excesivo para un usuario normal o aficionado que empieza, pero que para un aficionado realmente serio con cierta experiencia, que se exija resultados y desea buenos materiales, resultará una inversión interesante. Sin embargo, su precio nuevo en los comercios españoles - entre 2.300 y 2.800€ - es prohibitivo para un fotógrafo que no sea profesional del sector y no lo necesite para vivir. En el siguiente diagrama se puede ver la evolución del precio de este objetivo en comercios ingleses (libras esterlinas) desde Noviembre del 2008:




El contenido del paquete incluye una práctica bolsa LCH-1326 de transporte, similar pero más grande que la del Zuiko 50-200 2.8, el manual de instrucciones, las tapas delantera y trasera (LC-77 y LR-1) y un fantástico parasol de pétalos LH-82 que está forrado por la cara interna de un material sintético parecido al terciopelo que supongo que sirve para absorber la luz y los reflejos con mayor eficacia. El parasol dispone, como el del 50-200 SWD, de una ventanilla que al abrirse permite acceder al filtro polarizador para su orientación, lo cual es una gran comodidad.




Sus dimensiones son considerables, 96.5 mm de diámetro por 213.5 mm de longitud, pero es cómodo. Además, su construcción semi-telecéntrica hace que el barril interno no alarge la longitud del cuerpo del objetivo al enfocar o variar la longitud focal. Una construcción bien pensada para que sea práctico y su uso confortable. No es el típico objetivo que lo dejas colgando y se te empieza a alargar el tubo para que nos entendamos. Tiene un diámetro de filtro de 77 mm y esto significa que es compatible con el sistema de filtros Cokin P y compatibles. Tengo un artículo sobre filtros y dónde adquirirlos a buen precio por internet que recomiendo echarle un vistazo por si os pudiera interesar.

A modo de conclusión diré que estoy encantado con este objetivo. Lo adquirí de ocasión en FotoCasanova, una tienda de Barcelona donde el trato siempre ha sido exquisito, con su correspondiente garantía de un año. Es un objetivo que para mi, me proporciona una gran satisfacción y es el complemento perfecto a un gran angular y un teleobjetivo de mayor focal de la misma calidad profesional.

Los pros:
  • Calidad óptica insuperable
  • Nitidez constante a cualquier focal y abertura de diafragma
  • Construcción robusta impermeabilizada
  • Único de su clase
  • Manejable y de uso agradable
  • Excelente para paisajes, tomas corrientes y retratos
  • Bokeh y desenfoques increibles
Los contras:
  • La calidad tiene un precio
  • Demasiado corto para naturaleza y deportes
  • Todo el mundo te para por la calle preguntando "¿quién se casa?", "¿eres de Salsa Rosa?" o "¿de que periódico eres?" Esto me da la risa :-)


Veredicto final según mi humilde saber y entender:

Estamos ante un objetivo sin igual, de un rendimiento y calidad óptica ultraprofesional, del que cabe destacar la soberbia nitidez de las imágenes que produce y un maravilloso desenfoque selectivo. Un objetivo que hace gala de la bien merecida reputación de los objetivos de la casa Zuiko, como sólo los nipones son capaces de hacer. En definitiva, un objetivo altamente recomendable, que no deja indiferente a quien lo prueba y que se podría considerar esencial para un profesional del retrato. Si tienes pasta y bíceps, vale la pena tenerlo.

Internautas TV, televisión de la Asociación de Internautas.